domingo, abril 10, 2005

El pueblo Mapuche

Esta zona de Chile donde me encuentro, que es una zona de lagos y volcanes, fue donde los Mapuches tenían su casi estado soberano hasta bien entrado el Siglo XIX, separado de Chile. En 1598 los Mapuches se revelaron contra los colononizadores españoles y lucharon con uñas y dientes, logrando que por casi tres siglos los dejaran en relativa paz. El ejército argentino se adentraba por esta zona y los perseguía, así lo cuenta una historia que ha ido pasando de padres a hijos por generaciones, pues la cultura Mapuche es básicamente oral. Hace 13o años el gobierno Chileno decidió que ya era hora de acabar con la autonomía mapuche, y colonizo estas tierras con familias venidas en su gran mayoría de Europa. A los Mapuches los desplazaron a "reductos", pasando a vivir como ciudadanos de segunda clase.

Hoy me fui a caminar por unos cerros cerca de Pucón, donde hay una mayoría de población Mapuche, muy aculturada, pero que aún sigue algunas tradiciones. Me econtré con Don Mario por el camino, que me invitó a conocer sus tierras, y me señaló el recinto donde cada cuatro años celebran el nguillatún. Debajo un pequeño texto que he encontrado en Internet y habla del nguillatún:

"En el recinto destinado al nguillatún plantaban una gran rama de canelo --el árbol sagrado de los mapuches-- y otra de maqui, amarradas a un tronco semejante a una escala, Rehue, y a su pie colocaban corderos, pan y chicha de maíz en cántaros. Las rogativas las pronunciaban unos ancianos prestigiosos, al mismo tiempo que ofrecían la sangre de los corderos recién sacrificados. Inmediatamente toda la concurrencia empezaba a dar vueltas en torno al rehue, cantando y bailando al son de sus instrumentos musicales, poseídos de frenética excitación. La escena culminaba con la subida de la machi al rehue, donde, en actitud arrobada, imploraba a los espíritus los deseos de la multitud. Hoy día ya no se nombra al pillán en los nguillatunes. Se ofrece el acto al Creador Supremo, el Dios que ellos llaman Nguenechén."

1 comentario:

Anónimo dijo...

Oi Mikel,

A sua viajem está mesmo incrível!
As fotos estão lindas.

Beijos,
Marcela